FORMACIÓN PARA UN OCIO EXPERIENCIAL VALIOSO A LO LARGO DE LA VIDA: CONTRIBUCIÓN DE LOS ITINERARIOS DE OCIO AL ENVEJECIMIENTO SATISFACTORIO. (ITINERE)

Fecha Inicio: 01/10/2012
Fecha Fin: 31/12/2015

Organización Responsable

Universidad de Deusto

Nombre del Proyecto

FORMACIÓN PARA UN OCIO EXPERIENCIAL VALIOSO A LO LARGO DE LA VIDA: CONTRIBUCIÓN DE LOS ITINERARIOS DE OCIO AL ENVEJECIMIENTO SATISFACTORIO. (ITINERE)

Fechas

01/10/2012 – 31/12/2015

Organización Coordinadora (Institución, País)

Instituto de Estudios de Ocio Facultad de Ciencias Sociales y Humanas Universidad de Deusto (Spain)

Organizaciones Participantes (Institución, País)

Instituto de Estudios de Ocio Facultad de Ciencias Sociales y Humanas Universidad de Deusto (Spain)

Nombre de la Convocatoria

MINISTERIO DE ECONOMIA Y COMPETITIVIDAD PLAN NACIONAL de I+D+i 2008-2011 Subprograma de Proyectos de Investigación Fundamental

Objetivos

La pertinencia de esta investigación viene avalada por, al menos, tres tipos de razones principales :
– Científicas: el concepto de «ocio experiencial valioso» está a la vanguardia de los Estudios de Ocio en el siglo XXI. Es un desarrollo teórico exigido por los nuevos retos que nos presenta la sociedad contemporánea (tipología «senior», ocio saludable, envejecimiento activo, etc.), para responder a los cuales hemos de desarrollar nuevas herramientas que demuestren cómo el ocio no es sólo un argumento esencial de la calidad de vida sino una dimensión experiencial que requiere un cuidado, formación y atención específicos a todo lo largo de la existencia humana.
– Sociales: ante el reto del envejecimiento progresivo de la población, los agentes directamente implicados en la intervención socio-educativa requieren -confrontados con las nuevas realidades demográficas, laborales, tecnológicas, etc.- unas pautas de acción que deben ser elaboradas a partir de las conclusiones extraídas del estudio comparativo de las trayectorias vitales de aquellos «senior » para los que el «ocio serio» ha supuesto un motor de desarrollo personal, tanto física como intelectualmente.
– Formativas: El papel de la formación inspira toda la secuencia de nuestro proyecto, desde sus aspectos teóricos iniciales, dedicados a consolidar el concepto de ocio experiencial valioso, hasta sus pautas de intervención destinadas a los profesionales y agentes sociales, pasando por las sucesivas fases del estudio empírico, tanto a nivel cuantitativo (vid. metodología: borrador de cuestionario con asesoramiento previo de panel de expertos + validación + pre-test + aplicación + análisis, elaboración y discusión de resultados) como cualitativo (vid. metodología: discriminación de buenas prácticas + grupos de discusión seleccionados + estudios de caso en profundidad + análisis y elaboración).
La hipótesis de partida en que se sustentan los objetivos del proyecto es esta: el «ocio experiencial valioso» exige una serie de cuidados y garantías a lo largo de todas las etapas de la vida del ser humano; para elaborar unas pautas formativas que permitan a los diferentes agentes sociales intervenir en su promoción, creemos que es imprescindible desarrollar una herramienta práctica y novedosa: la reconstrucción de itinerarios de «ocio serio» en personas mayores que, por su carácter representativo y extrapolable, revelen cuáles han sido en cada caso los factores y los procesos concurrentes en la consolidación de dicho «ocio saludable».
Por tanto, podríamos formular nuestra hipótesis rectora como sigue:

consideramos que los itinerarios de ocio valioso a lo largo de la vida contribuyen positivamente al bienestar personal;
creemos que las personas que han cultivado de forma equilibrada una afición, dando lugar a una trayectoria coherente durante la cual se ha tenido que negociar con barreras así como implicarse en un repertorio de actividades percibidas como vitalmente significativas, dando lugar a una actitud socialmente más autónoma y participativa, serán personas que puntúen más alto en las escalas de desarrollo y bienestar personal.
Y creemos que al reconstruir sus historias de vida desde sus itinerarios de ocio, se nos volverán más claros cuáles han sido los factores que han favorecido la percepción de que el ocio valioso ha contribuido de manera decisiva a su bienestar personal. De este modo, nos gustaría verificar de forma cualitativa una hipótesis que estimamos innovadora: la incididencia de los itinerarios de ocio experiencial valioso sobre el bienestra personal percibido, uno de los ejes sobre los que han de trabajar las políticas de envejecimiento satisfactorio en el siglo XXI.
Y creemos que la solidaridad intergeneracional es uno de los valores que pueden ayudar a transferir a la juventud actual aquellas propuestas formativas que hayamos elaborado a partir del análisis de las historias de vida de la población de tercera edad.

Contenido

La finalidad más próxima de este proyecto es definir y promover la formación en el ocio experiencial valioso. Para ello, es preciso detectar y analizar diferentes patrones de ocio, testando cuál es la relación de cada uno de ellos tanto con el “ocio serio”, conceptualizado en anteriores investigaciones de nuestro equipo (Cuenca, 2000, 2004, 2006; Monteagudo, 2008), cuanto con el “ocio experiencial valioso”, es decir, aquel que se convierte en factor de desarrollo personal positivo, algo en que inciden la literatura científica e importantes manifiestos institucionales (Sagy, Antonovsky & Adler, 1990; Cuenca, 2000; Csikszentmihalyi, Cuenca, Buarque, Trigo et al., 2000; Setién, 2000; World Health Organization, 2002; San Salvador del Valle, 2008).
Se trata de una perspectiva novedosa que permite el análisis dinámico de la experiencia integral de ocio, a la luz de las trayectorias personales de sus protagonistas, cuyo arco temporal viene así definido por una serie de prácticas de arraigo, consolidación, enriquecimiento o reemplazo de aquellas prácticas que han otorgado a sus ciclos vitales un sentido y una motivación positivos, tanto en las esferas física e intelectual como en la social (negociación con barreras, enriquecimiento de su mundo social, resistencia a la depresión, autorrealización y sentido de logro individual y/o grupal, etc.).
Son varios los perfiles que extraeremos de la población de la muestra, en función de si perciben o no una correlación positiva entre la práctica de sus actividades de ocio y su bienestar personal. Es importante que nos situemos en el nivel del bienestar percibido, superando modelos estandarizados de «calidad de vida» que desatienden aspectos relevantes de la subjetividad.
Entre los individuos que puntúen alto en los cuestionarios de ocio y bienestar, descubriremos diferentes patrones: nos interesan especialmente aquellos grupos poblacionales que, además de percibir una incidencia positiva de su repertorio de ocio sobre su bienestar personal, han cultivado de forma perseverante una actividad especialmente significativa para ellos a lo largo de sus vidas, El conjunto de factores promotores de esa práctica, los recursos psicosociales necesarios para negociar con barreras y para dominar el entorno, así como para participar de forma más o menos activa de una comunidad de practicantes conforma lo que denominamos «itinerarios de ocio».
La reconstrucción de estos itinerarios en la fase cualitativa de la investigación nos permitirá descubrir cuáles son las claves de un ocio experiencial valioso. Nuestro modelo apunta a que un ocio experiencial valioso es aquel que concilia de forma equilibrada la práctica especializada de una o varias actividades con una « periferia » de prácticas de orden más efímero o casual: poniendo en cualquier caso en el centro de nuestra atención no el mero «activismo» sino la capacidad de dotar al sujeto de los recursos que le permiten transformar su actividad en una experiencia valiosa para su autorrealización personal y su resignificación social.
Nuestra hipótesis apunta a que las personas con un itinerario de ocio valioso, cultivado a lo largo de su vida, y que se haya visto además acompañado de forma equilibrada por una periferia de prácticas más informales, perciben una correlación más intensa y positiva entre ocio y bienestar. Nuestra propuesta consiste en defender que éste es un indicador emergente del envejecimiento satisfactorio: las escalas de bienestar personal al que contribuye un itinerario de ocio valioso apuntan, por tanto, a un enriquecimiento del mundo social del practicante, a una resignificación muy positiva del rol de la tercera
edad en las prácticas de ciudadanía y al desarrollo de destrezas para negociar con barreras de la vida cotidiana.
No nos proponemos, por tanto, estudiar la práctica de actividades de tiempo libre por sí misma, sino los itinerarios del ocio arraigado a lo largo de la vida, generadores de hábitos y procesos de desarrollo formativo en las personas, cuyos beneficios no afectan únicamente a la mejora de su estado físico y mental, sino también al modo como el individuo logra una proyección social más completa y satisfactoria, resignificando positivamente su capacidad de participar en el espacio comunitario. De hecho, nuestra hipótesis de trabajo resulta altamente innovadora, en la medida en que concede un valor principal a una tipología de ocio conceptualmente vanguardista: las trayectorias vitales que seleccionaremos serán representativas de un cultivo de actividades de ocio en que se produzca un equilibrio entre apertura y arraigo (ocio casual y ocio serio, en terminología de Stebbins), pues una apertura total de las prácticas de ocio puede conducir a un diletantismo carente de motivaciones suficientemente fuertes, así como acepciones extremas de ocio serio pueden desembocar en patías y estilos de vida desajustados y cerrados al desarrollo personal.

Investigación